El grafiti ha pasado de las paredes a las galerías de arte de París, Barcelona, Berlín… y ahora os proponemos que llegue a vuestras casas. El objetivo de esta actividad es reconectar a los empleados entre ellos y con la compañía, representando los valores de la empresa a través de un dibujo pintado con la técnica del grafiti. El resultado no es crear una obra de arte, sino una representación personal de lo que simboliza la compañía, haciendo que esta visión tenga un valor y perdure en el tiempo a modo de cuadro o incluso de calendario o elemento de regalo (taza, camiseta, …). Pintar con espray requiere de una técnica específica: medir la distancia entre el bote y el lienzo, escoger el tipo de boquilla, la presión que se quiere ejercer… todo ello para crear rellenos, líneas o efectos que den singularidad y efecto a nuestra creación.

Dinámica:

Los participantes se dividirán en equipos de 4-6 personas. Cada participante del equipo será el encargado de esbozar un fragmento del dibujo final, que será el resultado de la suma de los 4-6 bocetos. Para elaborarlo los asistentes recibirán un kit de ilustración con el material necesario y unas instrucciones. Las instrucciones se realizarán en nuestro plató por parte de Soem (artista experto en grafiti), quien dará las directrices de la técnica para desarrollar el dibujo. Esta actividad se puede realizar con la colaboración de un Centro de Menores, mediante el pase de un vídeo en el que dos o tres niños explican el concepto que deben representar y cómo creen que debe realizarse el dibujo. De esta manera fomentamos la alineación de los asistentes con la causa social y fomentamos el engagement y la implicación.

Entitades que reciben el beneficio social de esta actividad: